Polestar, filial de Geely que a su vez es una matriz de Volvo, ha iniciado la producción de su nuevo modelo Polestar 2, su coche eléctrico compacto de alta gama, en la planta de Luqiao (China) a pesar de que el coronavirus sigue propagándose a nivel mundial. Las primeras unidades de este modelo desembarcarán en Europa.
Thomas Ingenlath, CEO de Volvo, ha explicado que "comenzamos la producción en circunstancias complicadas, con un fuerte enfoque en la salud y la seguridad de nuestra gente. Este es un gran logro y el resultado de los grandes esfuerzos de la plantilla de la fábrica y del equipo que asegura la cadena de suministro", dando así el pistoletazo de salida a la fabricación del que será el primer modelo cero emisiones que se fabrica en esta factoría, a pesar del "momento de gran agitación al que se enfrenta el mundo por la pandemia".
Polestar tiene previsto que las primeras unidades de su nuevo coche eléctrico lleguen a Europa el próximo verano, y posteriormente se empezarán a entregar ejemplares en China y en Norteamérica. Las reservas están abiertas en diez mercados, previo desembolso de 1.000, y se irán habilitando paulatinamente más configuradores en todo el mundo.
Los precios de partida rondarán, según mercados, los 60.000 euros, aunque más adelante habrá una versión más económica.
El Polestar 2 estará dotado de dos motores eléctricos para un total de 300 kW de potencia (408 CV) y 660 Nm de par máximo, y una batería de 78 kWh integrada bajo el suelo del modelo con una autonomía para 500 kilómetros.
Promete una aceleración de 0 a 100 km/h en menos de 5 segundos, e incluye en el habitáculo un sistema multimedia con pantalla táctil de 11 pulgadas, sobre el sistema operativo Android con servicios Google integrados como Google Maps, Google Assistant o Google Play Store, además de reconocimiento natural de voz.
