El fabricante coreano de baterías SK Innovation ha anunciado que está desarrollando nuevas celdas para baterías de vehículos eléctricos, de forma que con tiempos de parada muy cortos, los coches eléctricos que implementen sus baterías serán capaces de recorrer 800 kilómetros con tan solo dos cargas de 10 minutos cada una.
Las nuevas celdas de SKI estarán listas para su producción en la primera mitad del año que viene, aunque la empresa asegura que el plazo puede extenderse hasta finales de año, de forma que la comercialización de estas nuevas celdas, “podría desempeñar un papel importante en la popularización de los vehículos eléctricos".
La compañía no ha revelado ningún detalle en relación a la química utilizada por las nuevas celdas, pero si que la autonomía que extrae de ellas se debe a la alta densidad de energía que ha logrado implementar, aunque esta no es su característica más importante ni la base de su oferta comercial; sino que lo más importante es que será posible cargarlas rápidamente y alcanzar con ellas hasta 1.000 ciclos de carga y descarga, lo que alarga la vida útil de las baterías.
Por lo tanto, la estrategia de SKI no es implementar una gran capacidad en las baterías que suministre a sus clientes, sino proporcionarles una velocidad de carga muy elevada que no se traduzca en una degradación a corto ni medio plazo. De esta forma, incluso un coche eléctrico pequeño que no permita un gran batería en su interior, podrá realizar viajes de larga distancia, proporcionando tiempos de recarga muy cortos para recuperar de nuevo toda su autonomía, siempre considerando que la red de recarga rápida esté suficientemente extendida.
La empresa surcoreana confía en que la red de recarga rápida y ultra rápida en autovías y carreteras se extienda lo suficiente como para que no sea necesario que los coches eléctricos carguen con una batería excesivamente pesada que en realidad no necesitan, de modo que por encima de la alta capacidad de las baterías, van a centrar sus esfuerzos en una estrategia de marca denominada “SK Inside” basada en el desarrollo de "baterías de larga duración que ofrezcan la posibilidad de realizar desplazamientos muy largos”.
SKI desarrolló sus primeras baterías de iones de litio en 1996, y ha suministrado baterías para vehículos eléctricos e híbridos enchufables durante 10 años sin un solo incidente por incendio de la batería.
Así las cosas, SK Innovation está construyendo actualmente en Estados Unidos dos fábricas de baterías capaces de suministrar celdas de baterías para 300.000 coches eléctricos.
