El Hongguang Mini EV es un coche eléctrico chino que ya ha superado en ventas al mismísimo Tesla Model 3 en gran medida por su sorprendente precio, que parte de los 3.600 euros.
Se trata, sin duda, de una cantidad irrisoria para un microcoche eléctrico fabricado por el conglomerado asiático SAIC-GM-Wuling, con capacidad para cuatro personas y que puede alcanzar una velocidad máxima de 100 km/h, que ha logrado convencer a miles de conductores, hasta tal punto de superar en ventas en China a la todopoderosa Tesla.
De esta manera, el Hongguang Mini EV, que se vende como "la herramienta de desplazamiento de la gente" apuesta por imponerse a los fabricantes europeos, y ya es el segundo coche eléctrico más vendido del mundo.
Su modelo básico que puede adquirirse por 3.600 euros al cambio, no lleva aire acondicionado y tiene una autonomía de 120 kilómetros bajo el ciclo NEDC, pero también ofrecen una versión por 4.900 euros que sí incorpora aire acondicionado y ofrece una batería de 13,9 kWh que permite alcanzar los 170 kilómetros (NEDC).
Este tipo de vehículos representa una de las grandes esperanzas chinas para colocarse como referente de la industria automovilística. Tesla sigue siendo la compañía que más coches eléctricos vende en el país asiático, pero la gran diferencia en casi todos los aspectos, entre el Model 3 y este Hongguang Mini EV haterminado decantando la balanza en favor del segundo.
Y es que este pequeño coche low-cost ha vendido 112.000 unidades durante la segunda mitad de 2020, y en total desde que comenzó su producción ha vendido 25.778 unidades, según datos de China Passenger Car Association (CPCA), por los 13.843 del Model 3, unos datos que convertirían al Hongguand Mini EV en el segundo coche eléctrico más vendido del mundo.
El pequeño eléctrico se ofrece en tres versiones y cuatro colores: azul, blanco, rosado y marrón claro, y por el momento no hay planes para su llegada a Europa, aunque BBC apunta que la marca estaría trabajando con un fabricante de Letonia para adaptar el vehículo a la regulación europea, aunque previsiblemente el precio con el que llegará al viejo continente será superior.
