Reikiavik, Glasgow y Lisboa son las ciudades europeas mejor equipadas para utilizar un coche eléctrico, según una clasificación elaborada por la web especializada uswitch.com, que lleva comparando datos del sector desde 2010 y que sitúa a Barcelona en sexto puesto mundial, y el primero en España de esta clasificación.
Esta lista ha sido definida sumando cuatro criterios: el porcentaje de sitios de carga gratuita, el precio medio de la energía, la potencia promedio de recarga y la distancia entre los sitios de carga.
Reikiavik obtiene la máxima puntuación, con 7,94 puntos sobre un máximo de 10, gracias a la reducida distancia de poco más de 500 metros entre los sitios de carga, la buena potencia promedio de recarga (26 kW) y el bajo precio de la energía (0.29 euros) en comparación con sus competidoras.
Glasgow ocupa el segundo lugar a poca distancia con 7,54 puntos y un mejor porcentaje de sitios gratuitos (92 %); mientras que Lisboa, con 7,31puntos, se sitúa en tercer lugar, al disponer del precio por kilovatio más barato de Europa (0,17 euros).
Budapest y Oslo figuran en cuarta y quinta posición, mientras que la primera ciudad española presente es Barcelona, que aparece en sexta posición gracias a que el 60 % de sus sitios de carga son gratuitos, siendo en en este criterio la tercera cifra más alta de Europa, sólo por detrás de las primeras dos ciudades de la lista.
Barcelona es también es un 50 % más barata que Madrid, que ocupa el décimo tercer puesto de la clasificación y donde sólo el 20 % de los cargadores son gratuitos, siendo los de pago un 8 % más caros que en la ciudad condal.
Las peores ciudades europeas para ser propietario de un coche eléctrico, según este informe, son: Liverpool (Reino Unido) -con una puntuación de 4,89-, París -5,68-, Viena -5,80-, Fráncfort (Alemania) -5,81-, y Rotterdam (Países Bajos) y Colonia (Alemania) -ambas empatadas con 5,89 puntos-.
Este estudio de uswitch.com también señala que Europa tiene a día de hoy ocho veces más vehículos eléctricos en carretera que en 2015, y destaca como los países europeos con mayor penetración del coche eléctrico en el último decenio son Chipre, Luxemburgo e Irlanda.