Bosch se ha fijado el objetivo de desarrollar servicios de recarga que den acceso a una de las redes de recarga más grandes de Europa. En este sentido,  el presidente de la división de Soluciones de Movilidad Conectada de la compañía, Elmar Pritsch, ha afirmado que "con nuestros servicios de recarga, estamos desarrollando una llave universal para una de las redes de recarga paneuropeas más grandes. De esta forma, hacemos que la electromovilidad sea aún más viable".

A través de una aplicación, los conductores podrám acceder de esta manera a los más de 150.000 puntos de recarga que Bosch instalará en toda Europa, gracias a la negociación de contratos con operadores y utilizando métodos como el roaming para conectar los puntos de recarga.

Desde la compañía han advertido que los usuarios de modelos de coche  de cero emisiones quieren encontrar "rápidamente" un punto de recarga libre, acceder a él sin la molestia de autorización y contraseñas, pagar sin problemas la electricidad y hacer un buen uso del tiempo que conlleva la recarga.  En este sentido, desde la compañía han lamentado que "la realidad difiere: los conductores de coches eléctricos tienen de media seis aplicaciones de recarga distintas en sus 'smartphones' y tienen que hacer malabarismos con hasta cinco tarjetas de acceso para la recarga". 

Con esta nueva red de "electrolineras", Bosch aspira a cambiar las cosas en este sentido, y convertirse en el primer oprador europeo de este tipo de servicios.