El desarrollo del coche eléctrico pasa por contar con baterías de primer nivel que necesitan cubrir unas altas expectativas para lo que es necesario someterlas a diferentes test de pruebas, entre los que destaca el de la temperatura, dada su influencia en el rendimiento final de este elemento.

Para conseguirlo, el nuevo centro técnico denominado Mahle Powertrain, ubicado en Northampton, Inglaterra, se ha especializado tanto en el desmontaje como en el montaje de módulos y baterías de vehículos para su evolución posterior a una prueba.

Los dispositivos de este centro técnico permiten comprobar el funcionamiento de una batería en condiciones simuladas del mundo real, dado que se puede recrear un entorno climatizado.

Según Simon Reader, director de servicios de ingeniería de Mahle, "estas nuevas instalaciones han sido cuidadosamente desarrolladas para proporcionar una amplia capacidad de ayuda a la evaluación, prueba y optimización de la batería. El desarrollo interno de una instalación de este tipo sería prohibitivo tanto en lo referente al tiempo y los costes por parte de las marcas de automóviles, por lo que tiene sentido que Mahle Powertrain ofrezca una amplia gama de experiencia y capacidad que sea capaz de acelerar el tiempo de desarrollo en un solo lugar".

Este centro de desarrollo permite ofrecer un análisis de idoneidad posterior a la evaluación, así como realizar pruebas en condiciones de ciclos de conducción simuladas para evaluar el rendimiento de los sistemas de baterías en entornos de uso real.

Estos test tienen la capacidad de evaluar celdas, módulos y baterías para analizar la estabilidad del voltaje, así como la capacidad de almacenamiento y características térmicas, incluida la respuesta de voltaje bajo alta descarga, comportamiento térmico y resistencia interna.

Todas estas pruebas se pueden realizar a diferentes rangos de temperatura, de entre -40ºC hasta 100ºC, con un control preciso de la humedad y protección contra un posible incendio según la normativa EUCAR 5.